El presidente del Sindicato de Enfermería, SATSE, Manuel Cascos, ha denunciado hoy que, una vez superado lo peor de la pandemia del Covid-19, Gobiernos y partidos políticos han dejado en “vía muerta” a la sanidad pública y sus profesionales, porque se están mostrando incapaces de reaccionar y tomar medidas que mejoren la atención sanitaria y cuidados que se presta a más de 47 millones de personas.
Tras mantener una reunión extraordinaria del Comité Ejecutivo Estatal de SATSE, Cascos, junto a los/as secretarios/as generales autonómicos/as del Sindicato, se ha trasladado al Congreso de los Diputados para mostrar públicamente el gran malestar que existe entre profesionales sanitarios, pacientes y ciudadanía por el grave incumplimiento de los compromisos que todas las administraciones públicas y partidos políticos adquirieron cuando surgió la pandemia. “La iniciativa institucional y política, así como la capacidad de reacción, para reconstruir nuestra sanidad ha sido cero, nos están dando de nuevo la espalda”, apuntó.
Entre las más de diez iniciativas que SATSE ha propuesto al Congreso, Gobiernos y partidos antes y durante la pandemia y que siguen “guardadas en un cajón”, el presidente del Sindicato destacó la Ley de Seguridad del Paciente, cuya tramitación parlamentaria se está dilatando deliberadamente por parte de algunos partidos políticos, mientras que otros mantienen “un silencio cómplice”, lo que supone un desprecio absoluto y un grave perjuicio para los más de 47 millones de ciudadanos que merecen una atención y cuidados seguros y de calidad y para las más de 300.000 enfermeras y enfermeros de nuestro país que sigan trabajando en unas condiciones penosas y precarias.
Diez meses
En concreto, el responsable de SATSE se refirió al hecho de que el Partido Popular ha solicitado en 16 ocasiones y Ciudadanos en ocho que se prorrogue el plazo que tienen los distintos grupos políticos para presentar sus enmiendas parciales de cara a su posterior debate en la Comisión de Sanidad. “No quiero pensar que en ello tenga alguna influencia la empresa privada sanitaria”, añadió.
Por su parte, los partidos que sustentan al Gobierno, y que tienen mayoría de miembros en la Mesa del Congreso de los Diputados, están manteniendo una actitud de “complicidad silenciosa” que lleva a que, semana tras semana, se acuerde en este órgano prorrogar el plazo de presentación de enmiendas parciales a la Ley de Seguridad del Paciente.
En la actualidad, han transcurrido más de diez meses y son ya 23 las prórrogas acordadas en la Mesa del Congreso para una Ley que se tomó en consideración el 15 de diciembre de 2020, con el respaldo casi unánime de los grupos (312 votos a favor y solo 10 en contra), una vez que entró en el Parlamento tras conseguir el apoyo de cerca de 700.000 ciudadanos y profesionales, asociaciones de pacientes, organizaciones enfermeras de todo el mundo y personalidades de nuestro país.
Acabar con la temporalidad
Otras iniciativas de SATSE a Gobiernos y partidos políticos han sido sendas propuestas normativas en contra de las agresiones a los profesionales sanitarios y sobre el uso de medicamentos peligrosos, un Observatorio de la imagen de la Mujer en el ámbito sanitario y distintos planes para mejorar la situación de los centros sociosanitarios, acabar con la temporalidad y fomentar el retorno de profesionales que tuvieron que emigrar a otros países, así como propiciar una nueva oferta universitaria del Grado de enfermería y promover la jubilación anticipada y voluntaria de las enfermeras y enfermeros por su especialmente duras y penosas condiciones de trabajo.
Mejorar la salud
Asimismo, Cascos resaltó que la falta de interés real por mejorar la salud y bienestar de pacientes y el conjunto de la ciudadanía también se está constatando en recientes decisiones del Gobierno como el destinar una cantidad irrisoria de los fondos europeos al sistema sanitario, no priorizar la sanidad en el Plan para la recuperación, transformación y resiliencia de España ni en el Plan ‘España 2050, o no haberse puesto en marcha las medidas e iniciativas comprometidas en la Comisión para la Reconstrucción Económica y Social de nuestro país.
«Gobierno, comunidades autónomas y partidos políticos han vuelto a `meter en el trastero´ la mejora de la sanidad pública»
Según SATSE, una vez pasado lo peor de la pandemia, Gobierno, comunidades autónomas y partidos políticos han vuelto a “meter en el trastero” la mejora de la sanidad pública, y mientras eso sucede, la sanidad privada va viento en popa e incrementa cada vez más su margen de beneficios. En concreto, en 2020 la sanidad privada aumentó en un 4,4 por ciento el número de asegurados y en un 5,1 por ciento el volumen de primas. De igual manera, la empresa privada farmacéutica quiere ocupar espacios en la sanidad publica que no le corresponden con la complacencia de algunos partidos, aseveró Cascos.
Sanidad pública
“Ante esta grave situación, se no está empujando a la movilización para defender a la sanidad pública y sus profesionales”, dijo el presidente de SATSE, quien recordó que ya el pasado mes de junio se trasladó al conjunto de administraciones y partidos que los profesionales sanitarios no permanecerían pasivos, algo para lo que SATSE está preparado.
Al respecto, añadió que, salvo que haya una reacción en positivo en próximas fechas, el Sindicato de Enfermería comenzará a trabajar “de otra manera” en el conjunto del país y, para ello, tenderá su mano al resto de organizaciones que defienden a la sanidad, sus profesionales y a los pacientes y usuarios, además de a instituciones que representan a las enfermeras y fisioterapeutas a todos los niveles de representación.
Por último, el presidente de SATSE reiteró que la palabras de reconocimiento y agradecimiento hacia el conjunto del personal sanitario, y especialmente para las enfermeras, enfermeros y fisioterapeutas, se han quedado en nada, cuando se ha constatado que son los “motores” del sistema sanitario. En el caso de las enfermeras y enfermeros, aludió también a su atención cercana y no exenta de graves riesgos a los pacientes en los primeros momentos de la pandemia, así como en la detección y seguimiento de casos Covid y en la posterior campaña de vacunación en el conjunto del Estado.