Tras conocerse los últimos datos del Servicio Publico de Empleo Estatal (SEPE) que informan que el desempleo entre las enfermeras y enfermeros asciende a 2.878 personas, SATSE critica que las consejerías de Sanidad han optado por la “estrategia del avestruz” y esperar a que pase la sexta ola, en lugar de reforzar convenientemente las plantillas, aunque esto suponga sobrecargar aún más a miles de profesionales que llevan dos años luchando sin descanso contra la pandemia del coronavirus con el consiguiente desgaste y agotamiento físico y emocional.
El Sindicato de Enfermería subraya que, frente a lo que se argumenta desde distintas administraciones públicas, los datos oficiales del SEPE demuestran que hay un importante número de enfermeras y enfermeros engrosando las listas del paro que pueden ser contratados para ofrecer una mejor y más rápida atención sanitaria y cuidados en unos momentos aún muy difíciles por el incremento de los casos de personas afectadas con el Covid-19 que se ha experimentado en las últimas semanas.
Labor asistencial y de cuidados
Por contra, las consejerías de Sanidad prefieren ahorrarse los costes de nuevas contrataciones y mantener las plantillas actuales, aunque éstas sean claramente insuficientes y sufran, además, la perdida continúa de profesionales que dan positivo en Covid-19 y no pueden desempeñar su labor asistencial y de cuidados durante unos días.
«Una forma de actuar cortoplacista y cicatera”
Al respecto, desde la organización sindical se incide en que «esta forma de actuar cortoplacista y cicatera perjudica claramente a las enfermeras y enfermeros que se mantienen en su puesto de trabajo», ya que se ven obligados a doblar turnos, trabajar más festivos o fines de semana de lo que les corresponden o a no poder acceder a días de permiso y descanso, con el consiguiente desgaste físico, psicológico y emocional.
Seguridad asistencial
Una situación que lógicamente repercute en la atención sanitaria que reciben las más de 47 millones de personas de nuestro país que ven como aumentan las esperas, ya sea en un hospital o en un centro de salud, o como se posponen consultas e intervenciones no urgentes ya programadas con anterioridad. También repercute en su seguridad asistencial al no haber una asignación máxima de pacientes por enfermera o enfermero, apuntan desde SATSE.
Asimismo, el Sindicato advierte que las distintas administraciones competentes tampoco están haciendo nada para solucionar a medio y largo plazo la falta de enfermeras y enfermeros que sufre nuestro país, y que nos sitúa, año tras año, a la cola de Europa, y siguen si apostar por el retorno de los más de 8.000 profesionales que se vieron obligados a emigrar a otros países en los últimos años ni por aumentar la oferta universitaria del Grado de Enfermería salvo “honrosas” excepciones como, por ejemplo, Cataluña.
“Tanto gobiernos como partidos políticos no quieren ya recordar el compromiso adquirido meses atrás en el Congreso de los Diputados de reforzar las plantillas de enfermeras y enfermeros para mejorar la calidad y seguridad asistencial y van poniendo parches, con contratos temporales y precarios, que no solucionan la situación y siguen perjudicando tanto a los profesionales como al conjunto de la ciudadanía”, concluye SATSE.