Tras una análisis de la situación prevista en las diferentes comunidades autónomas, SATSE ha estimado que el porcentaje de contratación de suplencias de enfermeras y enfermeros en los meses de veranos está en torno al 35-40 por ciento, lo que supone que de cada 100 enfermeras que se van de vacaciones sólo se contrata a un máximo de 35-40 profesionales.
Esta realidad supone que las enfermeras y enfermeros que desempeñen su labor en los diferentes servicios de salud en verano tendrán que realizar el trabajo de casi tres personas, con lo que se sobrecarga aún más a unos profesionales sanitarios que llevan desde hace más de dos años acumulando un grave agotamiento físico, psicológico y emocional a consecuencia de su lucha en primera línea contra la pandemia del Covid-19, apuntan desde SATSE.
«La no sustitución de la totalidad de las enfermeras responde al deseo de las administraciones de ahorrar costes»
La no sustitución de la totalidad de las plantillas de enfermeras y enfermeros durante los meses de verano se ha producido siempre por el deseo de las diferentes administraciones sanitarias de ahorrar costes y, este año, además, se han producido problemas para encontrar profesionales dado el estructural y crónico déficit de estos sanitarios que sufre nuestro país.
Precarias condiciones laborales
En este sentido, SATSE subraya que, pese a que se viene advirtiendo y denunciado desde hace años que no graduamos a las suficientes enfermeras, y que, además, miles de ellas se ven obligadas a emigrar por las precarias condiciones laborales que hay en nuestro país, las diferentes administraciones sanitarias no han hecho prácticamente nada y ahora, una vez cronificado el problema, se “echan las manos a la cabeza” porque no encuentran suficientes profesionales.
“Raya la desfachatez y la desvergüenza el problema de déficit de enfermeras y enfermeros»
“Raya la desfachatez y la desvergüenza que las diferentes administraciones, que son las que han causado el problema de déficit de enfermeras y enfermeros, sean también las que ahora quieran escudarse en ese problema para decir que, aunque quieren, no hay enfermeras suficientes para contratar en verano”, señalan desde la organización sindical.
Asimismo, el Sindicato de Enfermería señala que esta falta de profesionales de Enfermería ha llevado a algunos administraciones sanitarias a tener que cerrar determinades unidades y servicios, reubicar a los profesionales en otros lugares o denegar permisos y vacaciones ya solicitados para intentar paliar los efectos de una negligente actuación por su parte en materia de recursos humanos.
Parches contínuos
“Este verano, una vez más, las distintas consejerías de Sanidad se están limitando a poner parches improvisados e insuficientes que no resuelven, en modo alguno, el problema de fondo que es no contar en ningún servicio de salud con las plantillas suficientes de enfermeras, enfermeros que, independientemente de la época del año, puedan garantizar la atención sanitaria y cuidados que se merecen las más de 47 millones de personas que hay en nuestro país”, afirma.
Al respecto, SATSE recalca que, si no se corrige con urgencia el déficit estructural de enfermeras, más pronto que tarde la administraciones se verán obligadas a dejar de prestar servicios y atención sanitaria en los centros de salud y hospitales, “y no es porque no se haya advertido con firmeza y rigor desde hace años desde el Sindicato”, concluye.