SATSE se ha sumado, un año más, a las distintas campañas y acciones reivindicativas y de sensibilización social puestas en marcha, en el marco del Día Internacional de la Mujer, para lograr una igualdad real y efectiva entre hombres y mujeres que acabe con todas las dificultades y obstáculos que se sigue encontrando este colectivo eminentemente femenino, tanto a nivel laboral, profesional y personal.
Problemas y barreras que conocen muy bien las más de 282.000 mujeres enfermeras que hay en nuestro país, y que suponen en torno al 85 por ciento del total de la profesión, las cuales siguen viendo como su excelencia profesional y laboral no se reconoce como se debería e, incluso, se minusvalora de manera reiterada por la única razón, en muchas ocasiones, de ser mujer.
Somos referentes e imprescindibles en nuestro sistema sanitario pero seguimos siendo invisibles
“Somos referentes e imprescindibles en nuestro sistema sanitario pero seguimos siendo invisibles para parte de nuestra sociedad y, sobre todo, para los responsables y gestores públicos que nos olvidan a la hora de situar a las enfermeras en los principales puestos de responsabilidad y decisión”, subrayan desde SATSE.
Liderazgo de enfermeras
Según el Sindicato de Enfermería, es absolutamente necesario un mayor liderazgo de las enfermeras dentro de los distintos ámbitos de responsabilidad administrativa y política de nuestro país para poder contribuir de manera decisiva en la mejora de la salud, bienestar y calidad de vida de más de 47 millones de personas.
En este sentido, SATSE reclama que las mujeres enfermeras ocupen más puestos y de mayor responsabilidad a nivel, no solo sanitario (gerencias, consejerías de Sanidad…), sino también en otros ámbitos de gobierno o de representación pública, como los parlamentos autonómicos o nacional, y dentro de los partidos políticos.
“No es entendible que solo haya una enfermera que es consejera de Sanidad, que ninguna haya sido ya ministra o que las enfermeras que ocupan direcciones generales en las consejerías o un escaño en los distintos parlamentos y asambleas se cuenten aún con los dedos de una mano”, apunta la organización sindical.
Fuera estereotipos sexistas
De igual manera, las mujeres enfermeras siguen sufriendo estereotipos retrógrados y sexistas que ofrecen una imagen irreal y dañina, así como numerosas situaciones en las que se infravalora su labor asistencial y de cuidados con comportamientos y comentarios machistas. También la grave lacra de las agresiones, sean físicas o verbales, les afecta principalmente, apunta.
SATSE hace también un llamamiento al conjunto de mujeres enfermeras para que “reivindiquen su lugar”
Ante esta lamentable realidad, SATSE hace también un llamamiento al conjunto de mujeres enfermeras para que “reivindiquen su lugar” dentro del sistema sanitario y denuncien cualquier obstáculo o barrera que dificulte su desarrollo a nivel profesional e impida que sus grandes capacidades de organización, gestión, e innovación logren una mejor atención y cuidados para sus pacientes y al conjunto de la ciudadanía, y contribuyan a la sostenibilidad del sistema sanitario.
“En los últimos años se ha avanzado hacia la consecución del objetivo final que nos debe unir a todas y todos de alcanzar una igualdad plena y real entre hombres y mujeres pero, sin duda, aún queda mucho camino por recorrer y muchas mentalidades y formas de actuar que cambiar para que se valore y reconozca en su justa medida la actividad asistencial, gestora, política, educadora, formativa o investigadora de las mujeres enfermeras”, concluye.