Los alumnos de la Escuela de Enfermería de Cartagena, un centro universitario que data de 1987, infradotado económica y materialmente, con instalaciones insuficientes y descentralizadas, gritan “BASTA”. Están cansados del incumplimiento de convenios, acuerdos y promesas por parte de la Comunidad Autónoma y de la Universidad de Murcia.
Instalaciones: Un barracón y un espacio cedido a 20 minutos
Los alumnos de este centro universitario, un centro propio de la Comunidad Autónoma dependiente de la Consejería de Medio Ambiente, Universidades, Investigación y Mar Menor y adscrito académicamente a la Universidad de Murcia desde 1995, denuncian la “deplorable” situación en la que se encuentra esta escuela universitaria. Un centro que no cuenta con edificio propio ni con instalaciones de prácticas en condiciones, obligados a recibir su formación en dos instalaciones diferentes, alejadas la una de la otra (un barracón anexo al Hospital El Rosell y unas instalaciones cedidas por la Universidad Politécnica de Cartagena (UPCT)).
Formación en prácticas deficitaria
Son varias las quejas y reclamaciones de estos estudiantes, por ejemplo, que no se amplían o renuevan los contratos de los profesores y que buena parte del material de prácticas está anticuado o caducado. A estas circunstancias se suma una sala de prácticas, en el Hospital Rosell, cuyo penoso estado imposibilita su uso. Cuando los estudiantes acuden a ella se encuentran con maniquíes de anatomía amontonados, botes de suero fisiológico caducados, material sanitario por estantes de aluminio sin orden, cajas de cartón por los suelos, goteras, techos levantados…
Estabilidad e Igualdad de condiciones
Los estudiantes defienden que la Escuela debería garantizar una formación de máxima calidad “con todos los recursos y medios que permitan el aprendizaje de una profesión con alta demanda y consideración social que trata con la vida de las personas”. Estos estudiantes no entienden por qué no tienen los mismos servicios que el resto de alumnos de Enfermería de la Región si pagan, por ejemplo, la misma matrícula.
Edifico propio o adscribirse a la UPCT
Los alumnos de esta escuela universitaria exigen la creación de un centro universitario de titularidad pública en Cartagena. Piden una sede propia única y centralizada, plenamente dotada de las infraestructuras, recursos materiales y humanos, así como un presupuesto que garanticen una formación enfermera pregrado y postgrado con los máximos estándares de calidad. Si esto no es posible, solicitan ser trasladados y formar parte de la Universidad Politécnica.
SATSE Murcia con los estudiantes de la Escuela de Enfermería CT
El Sindicato de Enfermería SATSE ha mostrado su apoyo a los alumnos y se ha comprometido a hacer suyas sus reivindicaciones, porque “es urgente que cuenten con una formación de calidad equiparable a la que se imparte en la facultad de Enfermería de la Universidad de Murcia” o en Lorca.
Los 250 alumnos de la Escuela de Enfermería de Cartagena merecen poder contar con “una escuela universitaria de calidad” porque, recordemos, “son los enfermeros del mañana”.