Frente al melanoma, educación y prevención

Frente al melanoma, educación y prevención

Más del 80% de los casos de melanoma se podrían prevenir. Por tanto la mejor arma es educar a la población en hábitos de vida que les alejen del riesgo de sufrir esta enfermedad, que durante la pandemia ha multiplicado por tres su diagnostico más grave. Desde las consultas de Atención Primaria, Enfermería desarrolla una intensa labor preventiva.

La incidencia del cáncer de piel aumenta cada año. El melanoma es el cáncer de piel más agresivo. Se desarrolla en la epidermis, la capa más externa de la piel y la exposición prolongada al sol constituye uno de los principales factores de riesgo. Según la Sociedad Española de Oncología Médica se estima que en 2021 se diagnosticarán en España  6.108 casos. De ellos, 3.678 se concentrarán en mujeres. La prevención primaria (la que intenta evitar el desarrollo de la enfermedad) es fundamental y debe darse durante todo el año.

Puede afectar a cualquier persona, aunque es más habitual en aquellos con piel clara y con más de 50 años. El sexo y la etnia también influyen, siendo más frecuente su aparición en mujeres y en personas blancas. La presencia de lunares o los antecedentes familiares y personales también aumentan las probabilidades de desarrollarlo, así como un sistema inmunitario débil.

En 2020 se diagnosticaron 5.489 casos  según el Observatorio del CáncerAlgo preocupante es el incremente de casos en los jóvenes, lo que está directamente relacionado con la exposición al sol y a la utilización de cabinas de autobronceado. En cuanto a la mortalidad, de enero a mayo de 2020 el melanoma maligno de piel fue el causante de 473 muertes.

Los principales tratamientos se basan en cirugía, radioterapia y/o terapia sistemática (quimioterapia, radioterapia, inmunoterapia y terapias dirigidas).

La enfermería tiene mucho que decir en la prevención del melanoma

Desde Atención Primaria, la enfermería desarrolla una importante labor de información a los usuarios sobre qué medidas tomar según cada tipo de piel. Son también las encargadas de hacer esa primera valoración cuando tenemos dudas sobre un lunar o una reacción en la piel. De nosotros también depende acudir al profesional de enfermería si identificamos alguna alarma. Desde hace tiempo llevan a cabo, además, programas de prevención del cáncer de piel desde las consultas de Enfermería. Nosotros hemos estado en una de ellas.

Especialmente en tiempos de pandemia, en el que hemos estado menos expuesto al sol, los cuidados de la piel deben ser mayores.

Retrasos en el diagnostico

La pandemia ha producido un claro retraso en el diagnostico de los tumores de la piel.  El melanoma representa el 4% de todos los tumores malignos de la piel, y según MD Anderson Cancer Center Madrid en los últimos seis meses se han triplicado los casos de tumores de piel avanzados atendidos, lo que ha supuesto una mayor utilización de terapias sistémicas, como la inmunoterapia (en Merkel o escamosos) y terapias dirigidas (basocelulares)”.

En cuanto al cáncer de piel no melanoma (basocelular y escamoso), que habitualmente son menos agresivos y suelen afectar a gente de mayor edad, también se ha disparado, al coincidir con el perfil de pacientes que se ha visto afectado por la pandemia. Pacientes que no acudían a revisiones por miedo a infectarse de coronavirus.

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