El próximo 23 de octubre se cumple un año desde la publicación del Real Decreto de Prescripción Enfermera. En este tiempo sólo han regulado la acreditación de los profesionales siete comunidades. Estas son Andalucía, Baleares, Canarias, Cantabria, Catalunya, Comunidad Valenciana y Navarra. La Mesa de la Profesión Enfermera denuncia que existe una desigual implantación en la acreditación en la prescripción enfermera.
La Mesa ha remitido cartas a todas las consejerías de salud que aún tienen este proceso pendiente. Se trata de Aragón, Asturias, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Euskadi, Extremadura, Galicia, La Rioja, Madrid y Murcia. También las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, a través del INGESA.
El Real Decreto establece que para el desarrollo efectivo de las actuaciones de indicación, uso y autorización de fármacos y productos sanitarios es necesaria la acreditación de profesionales. Es el caso de los responsables de cuidados generales y de los cuidados especializados. Al respecto se pronunciaba Manuel Cascos, presidente de SATSE, en el momento de la firma del Real Decreto en el Ministerio de Sanidad en octubre de 2018, un hito para la profesión.
Campañas de vacunación
Para la Mesa esta acreditación es necesaria en el caso de las campañas de vacunación como la gripe, que ya han dado comienzo, por ejemplo, en Euskadi. La acreditación está referida tanto a medicamentos no sujetos a prescripción médica como los que sí lo están. «Razón por la cual resulta necesario y urgente que las comunidades autónomas que todavía no han regulado dicho procedimiento, lo hagan a la mayor brevedad posible», señalan desde la Mesa.
La Mesa insiste en que es imprescindible favorecer la acreditación de los profesionales que ejercen su trabajo en el ámbito privado y como autónomos. Este derecho a la prescripción está reconocido para todos los profesionales, no importando su ámbito de actuación.
Un año desde su aprobación
Ya hace un año de la aprobación del Real Decreto. Este ha supuesto para SATSE un éxito de la profesión enfermera. Incorpora ventajas muy importantes para la Enfermería, los ciudadanos y el sistema sanitario en su conjunto. Supone una nueva competencia general que propiciará el avance y desarrollo de nuevos espacios profesionales. Además es una herramienta fundamental para garantizar la continuidad de los cuidados y agilizar la toma de decisiones. SATSE lleva defendiendo esta reivindicación desde 2001, donde fue un asunto tratado en su Congreso Estatal.
