Para conocerlo mejor nos hemos trasladado al servicio de HADO en el área Sanitaria de Pontevedra. Cristina, una de sus enfermeras, nos enseña lo que es un día a día en esta unidad. “HADO es un modelo asistencial organizado en el que acercamos el hospital al domicilio”, señala. De esta forma se utilizan recursos, tanto materiales como humanos, del hospital para proporcionar cuidados hospitalarios en el domicilio. Aunque es un servicio poco conocido, también es uno de los mejor valorados por los pacientes que hacen uso de él en el Sergas.
Después de una jornada entre ellos comprendemos mucho mejor el porqué de esa alta valoración. La clave está en las personas que forman los equipos, pues uno de los principales valores que tiene HADO es la posibilidad de ofrecer unos cuidados más personalizados. La empatía, la gestión, la profesionalidad, y la seguridad son la base de su trabajo.
El trato siempre es mucho más individualizado. Una vez en el domicilio la atención es plena para con el paciente y sus cuidadores. El ambiente más íntimo y relajado de un hogar y la sensación de que el ritmo lo marca el paciente también propicia unos cuidados más personalizados y un seguimiento a largo plazo que promueve una relación más cercana y cómplice.
Un equipo muy cohexionado
En HADO trabajan equipos compuestos por dos enfermeras/os y un/a médico. Cada equipo lleva 12 pacientes, seis por enfermero. Como una pareja de enfermeras comparte un médico, son muchas las ocasiones en las que deben acudir solas a los domicilios. Esta situación, en contra de lo que ocurre en muchos hospitales, está ayudando a visibilizar la profesión de enfermería.
El papel de la enfermería, tal y como explica Cristina, consiste en acercar la mayoría de los cuidados hospitalarios al domicilio utilizando diversas técnicas: desde las diagnósticas como control de constantes, toma de muestras o sondajes, hasta las terapéuticas. Se puede llevar a cabo, con evidentes excepciones, prácticamente cualquier técnica de las que enfermería puede aplicar en un Hospital.
Cuidando también de la salud mental
Pero las enfermeras de HADO también hacen intervención psicosocial, “tenemos en cuenta el afrontamiento que está pasando el paciente y la familia, de los recursos que hay en ese domicilio para poder afrontar los cuidados. Si es necesario algún recurso que no tienen nos ponemos en contacto con otros servicios sanitarios”.
En este sentido, también advierten que HADO podría mejorar mucho con la incorporación de otros profesionales como son los psicólogos. Algunos de los pacientes que están ingresados en esta unidad reciben cuidados paliativos y se están enfrentando a la muerte. Esto les genera una gran ansiedad e inseguridad que las enfermeras del HADO tratan de aliviar. Cristina reconoce que las enfermeras se ven en la necesidad de hacer un trabajo previo, pero que a veces, les faltan recursos para poder afrontar estos temas y la figura de un psicólogo sería de gran ayuda para este equipo de enfermería de hospitalización a domicilio.
Sin pausa durante la pandemia
La pandemia de la Covid19 ha cambiado mucho la forma de trabajar en algunas unidades. Sin embargo, la de HADO, ha seguido imperturbable incluso durante los meses de confinamiento. Desde el inicio se aplicaron las mismas medidas de seguridad que en un hospital: mascarilla, higiene de manos, guantes, ventilación y equipo de protección cuando la situación así lo requería.
Se trató de prestar más atención a los pacientes que presentaban sintomatología coincidente con la del coronavirus. De ser necesario se les realizaba una PCR y, en caso positivo, no se acudía al domicilio de forma preventiva.
El ingreso en HADO supone muchas ventajas: un evidente ahorro sanitario y unos cuidados más personalizados e individualizados para el paciente. Reciben la misma atención de calidad que en un hospital sin salir de su casa, mejorando así su calidad de vida. Pequeños detalles como comer su comida, estar en su entorno…son cuidados especiales que no puede tener en el hospital con un régimen que restringe las visitas y horarios.
Cuándo es conveniente el ingreso en HADO
Pero no siempre es conveniente este modelo, por eso para ingresar en esta unidad se tienen que cumplir una serie de requisitos:
- Que el paciente necesite ingreso hospitalario. Es decir, sino estuviesen ingresados en HADO tendría que estar en planta.
- El paciente debe tener un diagnóstico hecho.
- Estabilización clínica.
- Condiciones sociofamiliares adecuadas y un cuidador principal que sería la figura de referencia para HADO en todo lo relacionado con el enfermo.
- Paciente y cuidador deben aceptar el ingreso en HADO.
- Otros criterios geográficos.
- Las condiciones generales del domicilio son también un condicionante para que pueda ingresar o no en HADO. Debe mantener un nivel de limpieza y temperatura adecuada, así como recibir una alimentación sana y equilibrada.
Después de una evaluación inicial, una vez en el domicilio, la enfermera valora la situación clínica del paciente. Así, en función de su patología y necesidades, harán más hincapié en unos cuidados o en otros.
Lo que está claro, es que la filosofía con la que nació HADO no tendría ningún recorrido sino fuese por las manos que la llevan a la práctica. Algo que se evidencia en la profesionalidad que demuestra este equipo. No sólo se refleja en los resultados de mejora de sus pacientes, sino también en la manera en la que son recibidos cada vez que entran por la puerta de estos domicilios, a donde llegan no sólo para curar, sino también para cuidar, aliviar y en ocasiones, también acompañar.
