Una vez superado lo peor de la pandemia, SATSE recuerda que el conjunto de las enfermeras y enfermeros de los distintos servicios de salud han hecho posible que nuestro país encabece el ranking mundial en lo que respecta al número de personas que han recibido la pauta completa de vacunas contra el coronavirus, con un porcentaje próximo al 90 por ciento de la población inmunizada, y, con ello, que la incidencia del covid-19 se encuentre, en la actualidad, en unos niveles que permiten sobrellevar de manera más razonable la vida diaria.
Una situación que dista mucho de la que están sufriendo algunos países del Este de Europa, como Bulgaria o Rumania, debido a sus bajas tasas de vacunación, e incluso en otros estados, con alrededor del 70% de inoculados, que también están comenzando a tener problemas, caso del Reino Unido, Alemania, Países Bajos o Dinamarca.
Esta realidad que vive nuestro país ha sido elogiada por los principales responsables de organismos internacionales, como la Organización Mundial de la Salud (OMS) o la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), apuntando, además, que ha resultado clave para propiciar la mejora del tejido económico y social.
Esfuerzo continuado
Al respecto, el Sindicato de Enfermería incide en que este gran logro no hubiera sido posible sin que las enfermeras y enfermeros no hubiesen realizado su trabajo mañana, tarde, noche, festivos y fines de semana con el único objetivo de vacunar al mayor número de personas en el menor tiempo posible, y todo ello renunciando a su tiempo libre y con su familia y dejándose la piel por el bien e interés general.
Asimismo, SATSE apunta que desde el Gobierno, en palabras del propio presidente, Pedro ¨Sanchez, o de la ministra de Sanidad, Carolina Darias, también se ha puesto en valor de manera reiterada la campaña de vacunación y la labor de las enfermeras y enfermeros, al haber sido y seguir siendo el motor de desarrollo y avance de la campaña en el conjunto del Estado, lo que está permitiendo al conjunto de la sociedad volver progresivamente a la actividad diaria de antes de la pandemia.
Por ello, el Sindicato de Enfermería reclama al conjunto de administraciones públicas que prioricen e impulsen las distintas actuaciones necesarias para acabar con la precaria situación de las enfermeras y enfermeros que también encabezan rankings a nivel internacional, pero “negativos”, en aspectos como las tasas de temporalidad, la proporción de estos profesionales por número de habitantes o la falta de reconocimiento retributivo.
Por último, SATSE recalca que las enfermeras y enfermeros tienen que continuar con la campaña de inmunización del Covid-19, vacunar de la gripe y seguir realizando el resto de sus actuaciones asistenciales y de cuidados al conjunto de la población en los hospitales, centros de salud y otros centros sanitarios y sociosanitarios, sin que se estén viendo ninguna mejora a su situación profesional y laboral, como así se comprometieron los gobiernos y partidos políticos durante la pandemia.