El Ministerio de Sanidad desaconseja los test de autodiagnóstico Covid-19 que se venden en farmacias. Se recomienda la no prescripción por parte de los profesionales sanitarios de estos tests. La decisión se ha tomado en el seno del Consejo Interterritorial del SNS, de acuerdo con las comunidades autónomas, y en respuesta a las conclusiones de la Ponencia de Alertas, Planes de Preparación y Respuesta, que depende de la Comisión de Salud Pública del Consejo Interterritorial de Sistema Nacional de Salud. Estas pruebas de detección de anticuerpos no están indicadas para diagnosticar infección activa por SARS-CoV2 y, por lo tanto, no tienen que ser utilizadas con esta finalidad ni en personas con síntomas ni en individuos asintomáticos.
Las pruebas de autodetección no se encuentran recogidas en la Estrategia de Detección Precoz, Vigilancia y Control de Covid-19, por lo que a las autoridades sanitarias, dada la situación actual, les preocupa que sean un elemento que vengan a confundir a la población.
En cuanto a la solicitud de las Comunidades de Madrid y Murcia en relación a la realización de test en farmacias, el ministro ha dicho esto:
Plan de Navidad
En la reunión del Consejo Interterritorial también se han tomado otras decisiones en relación al Plan de Navidad. Así, cada gobierno autonómico ha quedado también facultado para endurecer, en función de su situación epidemiológica, las restricciones para el control del coronavirus.
De esta forma, las decisiones se tomarán por parte de las comunidades autónomas día a día; y de acuerdo a la situación epidemiológica que se esté viviendo en cada zona.
Estrategia de vacunación
Otro de los asuntos que se han tratado en el Consejo Interterritorial del SNS de esta semana ha sido la estrategia de vacunación. Ya se conoce que la primera vacuna que llegará a España, la de Biontech-Pfizer, de la que el ministro ha dado su previsión de aprobación en Europa y el deseo de que comience simultáneamente en toda Europa.
Salvador Illa también ha informado del sistema de información a través del cual todas las autoridades sanitarias autonómicas deberán facilitar la información referente a la vacunación frente a la COVID-19. En la Resolución se incluye la ficha con los datos que se deberán rellenar por cada una de las personas vacunadas. Estos datos son la fecha de nacimiento; el lugar de residencia; el tipo de vacuna; fabricante y lote. Asímismo, el motivo de vacunación.
El procesamiento estadístico de estos datos y su representación geográfica se considera un elemento de gran utilidad en el seguimiento de la pandemia. Además, el tratamiento de los mismos permitirá la emisión de certificados a solicitud del interesado.
La primera vacuna
Salvador Illa ha anunciado que el proceso de vacunación frente a la COVID-19 empezará en España el domingo 27 de diciembre. El ministro de Sanidad ha asegurado que las dosis llegarán el día 26 y que todas las comunidades autónomas recibirán al día siguiente, las que les corresponden, de acuerdo con el reparto equitativo previsto.
Illa ha hecho hincapié en que este importante paso “nos da esperanza porque significa el principio del fin de la pandemia” y ha recordado que, tal y como estaba previsto, se hará de forma coordinada en toda Europa. “No queremos esperar ni un solo día, queremos que el proceso de vacunación empiece lo antes posible. Si Europa ha acordado que empiece entre el 27 y el 29 en España vamos a hacerlo el 27”, ha indicado.
El ministro ha informado de que “será un número significativo de dosis el que llegue a nuestro país pero será un proceso progresivo y semanal; iremos recibiendo dosis y repartiéndolas entre las CCAA, que serán las que citen a las personas que tienen que ser vacunadas según los colectivos prioritarios establecidos en la Estrategia de Vacunación”. Salvador Illa ha hecho hincapié asimismo en que “habrá un número de dosis suficiente para todos los ciudadanos españoles”.
Veinte millones de dosis
De la primera vacuna en llegar a España, se han contratado veinte millones de dosis, que llegarán siguiendo un reparto equitativo y gradual, en relación al resto de países europeos. Los mismos criterios que se seguirán en el reparto de las dosis que se reciban a las comunidades autónomas. Estas dosis servirán para vacunar a diez millones de personas, ya que se requieren dos unidades para completar el proceso.
La vacuna de BioNTech-Pfizer ya se ha comenzado a administrar en Reino Unido y Estados Unidos. Este último país también ya ha autorizado la de Moderna. En ambos casos se tratan de vacunas genéticas de ARNm. Por ella, las propias células del cuerpo humano producen proteínas parecidas a la Sars-CoV-2. En la primera semana, casi 140.000 británicos ya han sido vacunados, según cifras del Gobierno británico.
