Cuidarme para poder cuidarte

Cuidarme para poder cuidarte

Toca cuidarme
El ser humano en general está diseñado para ayudar al prójimo. Pero a veces esta ayuda, cuando se produce de manera recurrente, puede llegar a desgastar al cuidador. A veces ni siquiera somos conscientes de ello, pero el cansancio va haciendo mella y puede repercutir negativamente en tu vida.

Por eso, aunque cuidarse siempre es necesario, se hace especialmente imprescindible en el caso de los que se dedican a cuidar a los demás. Mar Sánchez, enfermera desde hace 29 años, se dio cuanta de ello y decidió escribir el libro «Toca cuidarme», en el que quiere enseñar la importancia del autocuidado consciente. Pero de un cuidado que trasciende lo puramente físico, un cuidado emocional.

«La gestión emocional, eso también es cuidado»

Cuando su padre enfermó de Alzheimer su mundo se trastocó. El coaching estratégico se cruzó en su camino en un momento muy complicado y gracias a él consiguió salir adelante. Viendo el impacto tan positivo que tuvo en su vida, Mar decidió que debía compartir esta sabiduría y ayudar a otros a conocerse y cuidarse. «Toca cuidarme» es una guía para descubrirnos, equilibrarnos y aprender a cuidar(nos). Mar nos desvela qué es lo que el coaching puede aportarnos en esa labor de cuidar.

Estamos acostumbrados a ver lógico y admirable el cuidar de los demás, pero muchas veces el sacar un rato para cuidar de nosotros mismos se percibe como un gesto egoísta. Esto está tan grabado en nuestra cabeza que a veces nos hace sentir mal anteponer, en un momento dado, nuestro propio cuidado al tiempo que dedicamos a otros. Mar, con este libro, quiere dejar muy claro que para poder cuidar bien de otros, es imprescindible que nosotros estemos bien. Pero, ¿cómo podemos conseguirlo? Es sencillo: cuidando bien y frecuentemente de nuestra propia salud. Ella, a través de «Toca cuidarme» quiere darnos algunas herramientas para sentirnos en paz con nuestras emociones y con nuestra vida.

Mar, ha dado el salto del hospital a las librerías. Pero no es la única, cada vez son más las compañeras enfermeras y enfermeros que se están animando a escribir. Olga y Vanessa con sus Enfermeras invisibles, Fátima y su Última mirada,  Alberto y sus Batallas en la ambulancia o Héctor y su Silencio de los goteros son solo una muestra de cómo la enfermería tiene cada vez más historias que contar.

Una descarga emocional que se hace imprescindible para todos, pero especialmente para los que pasan su vida cuidando de los demás. Porque, aunque «cuidar es amar», ese amor debe empezar por uno mismo para poder compartirlo con los demás.

Estás viendo:
Cuidarme para poder cuidarte

¡Compártelo!