Pero la Educación para la Salud no solo ayuda a prevenir enfermedades o a mejorar la calidad de vida de los pacientes, también puede llegar a suponer un gran ahorro para el Sistema Nacional de Salud.
Un ejemplo de ello es el caso del gasto sanitario nacional anual en enfermedades como la diabetes. Según las cifras extraídas del Informe sobre el Impacto Económico de la Diabetes Tipo 2 en España2, el gasto sanitario derivado de esta enfermedad es de 5.809 millones de euros al año, de los que 2.143 millones se deben a las complicaciones derivadas de la enfermedad. Una cifra que ha aumentado en 12% desde 2019 y que, debido al envejecimiento de la población, seguirá aumentando exponencialmente los próximos años.
La diabetes provoca un gasto anual sanitario de 5.809 millones
Esta cantidad podría reducirse si la Administración Pública proporcionara a los pacientes una correcta formación sobre la enfermedad. Ernesto Valdés Vela, presidente de la Federación Regional Murciana de Asociaciones de Diabetes (FREMUD), considera que “es importante que las personas con diabetes puedan ser formadas correctamente desde el momento del debut, lo que ayudaría a mejorar la calidad de vida del colectivo y de sus familiares, además de contribuir a reducir el coste sanitario nacional por la diabetes y a la sostenibilidad de nuestro Sistema Nacional de Salud (SNS)”.
Educar no solo en la infancia
Las enfermeras y los enfermeros tienen un papel fundamental como profesionales de referencia de los pacientes con enfermedades crónicas como la diabetes, en el seguimiento de los procesos, así como en la activación y gestión de los recursos asistenciales humanos y materiales. Su perfil clínico y educativo, les convierte pieza clave para formación de los pacientes y sus familiares.
El objetivo de la educación para la salud no se limita a enseñar conocimientos, también pretende conseguir un cambio en la actitud de los pacientes que derive en modificación real de las conductas.
Objetivos de la educación para la salud:
- Promover estilos de vida saludables
- Desarrollar un criterio sobre las salud basado en la evidencia científica.
- Fomentar la autonomía de las personas en las decisiones sobre sus hábitos de vida.
- Ser responsables de nuestra salud y ayudar a otras personas a serlo.
- Empoderar al paciente para que asuma la responsabilidad de sus decisiones relacionadas con la salud.
La enfermera escolar
La infancia y la adolescencia son importantes etapas de aprendizaje y en las que se instauran muchos de los futuros hábitos de conducta. Por tanto, contar con una enfermera escolar en cada centro escolar es básico para evitar el desarrollo de determinadas enfermedades en el futuro.
Las enfermeras y enfermeros escolares juegan un papel fundamental para concienciar desde edades tempranas sobre temas de salud. A través de charlas o talleres la enfermera escolar puede acercar y comenzar a crear conciencia sobre temas tan importantes para la salud como son la alimentación, la práctica deportiva, los peligros del consumo de alcohol y drogas, la prevención de trastornos de la conducta alimentaria y la educación sexual entre otros.
Hay que comenzar a romper la herencia de hábitos que no son buenos para la salud y haciéndolo desde aulas y las consultas de enfermería podemos sentar las bases del derecho a una vida saludable y prevenir enfermedades que en futuro ocasionarán un gran gasto a los sistemas de salud.