El Sindicato de Enfermería, SATSE, ha subrayado la importancia de contar con una enfermera o enfermero en todos los centros educativos de nuestro país para garantizar adecuadamente la salud y seguridad del alumnado una vez que se ha constatado que los niños y niñas son el grupo de población en el que más circula el coronavirus.
Según los últimos datos dados a conocer a principios de semana, la incidencia acumulada en los menores era de 123,3 casos por cada 100.000 personas en los 14 días previos, mientras que la media de toda la población se situaba en 83,4 casos, por lo que desde SATSE se reitera la urgente necesidad de que todos los centros educativos cuenten, al menos, con una enfermera o enfermero que pueda desempeñar las funciones del denominado “coordinador covid”.
Sanidad y Educación
Tras el inicio del nuevo curso escolar 2021-2022, SATSE critica que los/as consejeros/as de Sanidad y Educación siguen sin asegurar un entorno seguro y saludable en el conjunto de los centros educativos al no apostar por una figura que beneficia, no solo al alumnado, sino a madres y padres, profesorado y al conjunto de la comunidad educativa. Un derecho que si tienen algunos centros.
De igual manera, SATSE defiende la implantación generalizada de la enfermera escolar para que, una vez se acuerde el inicio la campaña de inmunización entre los menores de 12 años, la administración de las vacunas se pueda hacer en los mismos centros educativos, siendo este profesional sanitario el encargado de gestionar, preparar y administrar las dosis pertinentes, así como de hacer el seguimiento y control de posibles efectos adversos, y todo ello siempre en coordinación y colaboración con Atención Primaria. Toda la comunidad educativa reclama este derecho.
Campaña de inmunización
Dado que una sola enfermera puede vacunar a cerca de un centenar de niños y niñas cada día, la campaña de inmunización sería más rápida y eficaz, evitando así, además, los desplazamientos a los correspondientes centros de salud con los consiguientes inconvenientes y perjuicios para ellos y ellas al tener que acudir a un entorno, como es el sanitario, donde existen más posibilidades de contagio del coronavirus. Asimismo, no conllevaría la perdida de horas lectivas por este motivo, señala.
“Si siempre resulta necesaria la presencia de, al menos, una enfermera o enfermero en cada centro educativo, en el nuevo curso lo es más si cabe ya que la amenaza del Covid-19 sigue muy presente y hay que priorizar la prevención, atención y cuidados a más de ocho millones de niños, niñas y jóvenes mientras cursan sus estudios durante gran parte de su jornada diaria”, asevera.
Por último, el Sindicato resalta que se ha podido constatar la labor decisiva de la enfermera escolar a la hora de evitar y controlar el virus en aquellos centros y territorios en los que ya se cuenta con este profesional sanitario. Caso, por ejemplo, de Andalucía, comunidad autónoma que el pasado curso ya apostó por esta figura y que ha conseguido que la práctica totalidad (98 por ciento) de sus centros educativos hayan estado libres de coronavirus.