Si bien SATSE valora como un avance los recientes nombramientos de enfermeras en puestos de responsabilidad, lamenta que el porcentaje sea tan reducido. Sólo el 5 por ciento de altos cargos sanitarios son enfermeras y enfermeros
Tras muchos años de casi nula presencia de enfermeras y enfermeros en altos puestos de responsabilidad sanitaria, varias comunidades autónomas responden a la demanda histórica de la profesión. La inclusión de enfermeras y enfermeros en los organigramas directivos se ha producido, en algunos casos, con la creación de una Dirección General de Cuidados. Con ello se «da mayor importancia a las políticas encaminadas a mejorar los cuidados que reciben los pacientes y ciudadanos», explica el Sindicato.
Dirección General de Cuidados
En Castilla-La Mancha, Asturias y La Rioja se han creado Direcciones Generales de Cuidados y en Cantabria, una Subdirección de Cuidados, mientras que una enfermera es viceconsejera de Salud y Familias de Andalucía y un enfermero director gerente del Servicio Navarro de Salud. Además, una enfermera lidera la Dirección General de Salud Pública de Baleares, y también en Baleares contamos con una enfermera como consejera de Salud de Baleares, que repite en el cargo tras las elecciones.
No obstante, la organización sindical lamenta que la llegada de enfermeras y enfermeros a altos puestos de responsabilidad administrativa se esté produciendo “a cuentagotas”, sin tener en cuenta su presencia cuantitativa y cualitativa.
“Las enfermeras constituyen alrededor del 40 por ciento del total y solo representan un cinco por ciento de los más de 170 altos cargos»
SATSE subraya el hecho objetivo de que «los recientes nombramientos se han producido en comunidades autónomas gobernadas por el PSOE, por lo que pide a sus compañeros de este partido en otras autonomías, así como al resto de formaciones políticas, con independencia de sus siglas, que sigan su ejemplo».
Cuidados en salud
Además de a nivel autonómico, SATSE ha vuelto a reclamar que, tras las elecciones generación del 10 de noviembre, el futuro ministro o ministra de Sanidad incluya una Dirección General de Cuidados. Con una enfermera o enfermero al frente, subraya SATSE, será más fácil «impulsar y desarrollar las políticas que posibiliten los objetivos que se marque este órgano».
Para SATSE, «la creación de esta Dirección a nivel nacional constituiría un avance importante para impulsar y mejorar los cuidados en el sistema sanitario público como respuesta a las necesidades actuales de carácter sanitario y sociosanitario que tiene la población española que cada vez cuenta con más personas mayores, dependientes y con enfermedades crónicas». Así lo reclamaba esta organización sindical tras las elecciones de mayo de 2019.